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samedi 22 avril 2023

EXPOSICIÓN EN SAO PAULO MUESTRA FOTOS DE FOTÓGRAFO BRASILEÑO SACADAS DÍAS DESPUÉS DEL GOLPE EN CHILE

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JEUNE HOMME ARRÊTÉ AU STADE NATIONAL IDENTIFIÉ ET
PHOTOGRAPHIÉ PAR DES MILITAIRES, S
ANTIAGO, CHILI, 22/09/1973.
PHOTO EVANDRO TEIXEIRA
Evandro Teixeira, Chile, 1973 / Exposición en Sao Paulo muestra fotos de fotógrafo brasileño sacadas días después del golpe en Chile / Se exponen de manera gratuita las fotografías que sacó Evandro Teixeira desde el 21 de septiembre de 1973. En entrevista con Interferencia, Teixeira recuerda cómo pudo acceder al cuerpo de Pablo Neruda y registrar el funeral del poeta, además de dar cuenta de su coraje para eludir la censura y sacar fotos de los prisioneros en el Estadio Nacional. [fotos / funeral vigilado]

EVANDRO TEIXEIRA
EN RÍO DE JANEIRO EN 2013.
FOTO DE ANDRÉ ARRUDA.
En el Instituto Moreira Salles de Sao Paulo, de manera gratuita, se está exponiendo hasta julio de este año el trabajo del fotógrafo brasileño Evandro Teixeira, que mostró al mundo los primeros días después del golpe de estado en Chile. La exposición, llamada está enfocada en las imágenes de esos primeros días de represión en Chile, aunque incluye también otras fotografías de la dictadura de Brasil, además de exponer las cámaras y los aparatos que acompañaron a Teixeira en su viaje por el violento y confuso 
Chile de fines de septiembre de 1973.

Teixeira ha sido uno de los principales nombres del fotoperiodismo brasileño del siglo XX. Nació en 1935 y trabajó en prensa durante casi sesenta años, 47 de los cuales dedicó su trabajo al medio Jornal do Brasil. Con su lente registró la trastienda del poder en el país, en particular las manifestaciones contra el régimen militar, además de temas asociados al deporte, la moda y la cultura. En su carrera también participó en importantes coberturas internacionales, siendo el golpe de estado en Chile el que marcó su carrera.

Me subí a la camilla dentro de la clínica, tomé varias fotos, aterrado, del cuerpo. Miré a mi alrededor, pensé en ese mundo en los fotógrafos en Santiago y me dije: no, no se puede, ¿solo yo aquí, solo yo?”, recuerda.

Yo traté de enfrentar con coraje esas situaciones para mostrar la realidad que estaba pasando. Para mí, recordar cómo llegué al Estadio Nacional, que era un centro de detenidos, es muy emotivo, fue muy fuerte”, cuenta a Interferencia en esta entrevista a través de videollamada, desde su hogar en la ciudad de Rio de Janeiro.

Teixeira partió a Chile, desde Brasil, un día después del golpe de Estado, pero fue detenido por varios días en aduana en Mendoza, junto a otros periodistas extranjeros. Llegó a Santiago el 21 de septiembre de 1973. En Chile, invitado por militares que querían dar señales de “normalidad“, logró fotografiar a los prisioneros del Estadio Nacional, escabulléndose en el estadio para librarse de la censura. También logró visitar a la viuda del poeta y premio Nobel Pablo Neruda, Matilde Urrutia, y al día siguiente de esta visita, fotografiar el cuerpo del poeta y su funeral, obteniendo imágenes inéditas de este momento histórico.

Me subí a la camilla dentro de la clínica, tomé varias fotos, aterrado, del cuerpo. Miré a mi alrededor, pensé en ese mundo en los fotógrafos en Santiago y me dije: no, no se puede, ¿solo yo aquí, solo yo?”, recuerda.

Mi aventura personal se identifica con la aventura vivida por el mundo. No me atribuyo el mérito de eso, soy un hombre empuñando una cámara. Cuando está bien usada, la cámara es un fósforo encendido en la oscuridad. Ilumina hechos que no siempre son muy comprensibles. Ofrece destellos, revela el dolor del callejón sin salida del mundo”, reflexiona el fotógrafo a sus 87 años.

Teixeira afirma que está en conversaciones para que esta exposición llegue a Chile. Espera que eso ocurra este año, al cumplirse 50 años del golpe de estado.

FOTO DE EVANDRO TEIXEIRA EN EL
ESTADIO NACIONAL DE SANTIAGO DE CHILE

- ¿Qué impresión y sensaciones le produjo Chile cuando llegó, unos días después del golpe de estado?

- Yo ya conocía Chile, porque había estado allí para la copa Mundial de Fútbol, el año 1962. Conocía bien Chile, especialmente la zona del estadio nacional. Lo primero que pude fotografíar cuando llegué fue la zona del Estadio Nacional, conocía a unos periodistas y pudimos entrar a retratar cómo estaban los prisioneros. Los militares querían mostrar cómo estaban los prisioneros, en la galería, arriba. El coronel mandó a todos al césped para que les sacaran fotos.

Y como sabía que había, ya conocía el estadio desde abajo, realmente mandó a todos ahí al césped. Pero yo conocía cómo llegar abajo en el estadio, así que pude bajar a algo así como el sótano del estadio, donde prisioneros fueron asesinados. Allí pude sacar algunas fotos.

"Al día siguiente, me había avisado por teléfono un amigo que Neruda lamentablemente había fallecido. Así que por la mañana partí a la clínica Santa María, donde estaba lleno de militares. Deambulé por el lugar. Yo siempre vi mi profesión con fe, diciéndome que siempre era posible hacer lo que yo quería".

- ¿Y cómo pudo llegar a cubrir el funeral de Neruda?

- Sobre la muerte de Neruda, nosotros, con los periodistas, habíamos escuchado que Neruda estaba mal, cuando estábamos trabajando en la Moneda. En ese momento el toque de queda empezaba a las 6 de la tarde hasta las 6 de la mañana. Todos los periodistas querían encontrar a Neruda, pero no se sabía con detalle donde estaba. Supe que había salido de Isla Negra hasta la clínica Santa María. Entonces yo fui para allá, la esposa me permitió ir para allá, Matilde Urrutia, y busque al director y hable con él, me envió una nota para poder entrar y yo fui con mi nota y mi camara, escondida debajo de la chaqueta.

EL POETA PABLO NERUDA Y SU ESPOSA MATILDE URRUTIA,
EN RÍO DE JANEIRO, RJ, 1968.
FOTO © EVANDRO TEIXEIRA

Al día siguiente, me había avisado por teléfono un amigo que Neruda lamentablemente había fallecido. Así que por la mañana partí a la clínica Santa María, donde estaba lleno de militares. Deambulé por el lugar. Yo siempre vi mi profesión con fe, diciéndome que siempre era posible hacer lo que yo quería. Así que pude entrar por una puerta cuando un militar se distrajo. Cuando abrí la puerta donde estaba el cuerpo de Neruda, yo primero saqué la foto, lo primero que hice y después entré. Y luego pasé, allí estaba Matilde Urrutia, su esposa, con un familiar, ella recordaba que yo había sacado fotos a Neruda cuando estuvo con Jorge Amado. Yo ahí pensé que yo no era importante, que la cámara era importante.

MATILDE URRUTIA, VIUDA DE PABLO NERUDA,
EN LA CLÍNICA SANTA MARÍA JUNTO
AL CUERPO DEL POETA,
SANTIAGO DE CHILE, 24/09/1973.
FOTO EVANDRO TEIXEIRA
En todo esa situación, no había ningún otro fotógrafo, estaba muy sorprendido de eso.

Y luego acomodaron el ataúd dentro de su casa, yo estaba afuera, estaban cinco de sus amigos adentro también. Los acompañamos a su casa, La Chascona. Cuando llegamos tuvimos que pasar un pasaje con agua. Y subimos unas escaleras para llegar a la casa. Ahí yo dije que podíamos poner unas tablas para pasar esa agua, hacer un puente y ahí pudimos pasar, sacando fotos siempre. Cuando llegamos a la casa, estaba toda destruída por los militares, que habían entrado.

En su casa estaban sus amigos, y su familia. Yo me quedé allí durmiendo en un sofá.

FOTO DE EVANDRO TEIXEIRA EN EL FUNERAL DE PABLO NERUDA.

Al otro día fuimos a su funeral, al cementerio. Allí le pusieron la bandera de Chile en el ataúd. En el camino al cementerio empezó a llegar gente porque se enteraron de la noticia de que Neruda había muerto.

"Un día salí del hotel, estaba en el Hotel Carrera, a una conferencia importante que daban en un ministerio. Yo pasé por la parte de atrás del ministerio y ahí veo que iban entrando con un cuarto de vaca, mucha carne, sobre el hombro de una persona. Yo me pregunté ¿Cómo es que a la población le falta carne y solo hay carne para él?".

Ahí fue apareciendo gente, amigos de Neruda, y Pinochet mandó a militares a asistir al funeral. Llegamos al cementerio, una cosa hermosa, muy maravillosa, gente cantando La Internacional, los poemas de Neruda y ahí lloré, se me cayeron lágrimas de emoción.

Me pasaron muchas cosas en Chile, porque estuve mucho en la calle. Y eso era un peligro, pero yo ni sentía el peligro en la calle.

Un día salí del hotel, estaba en el Hotel Carrera, a una conferencia importante que daban en un ministerio. Yo pasé por la parte de atrás del ministerio y ahí veo que iban entrando con un cuarto de vaca, mucha carne, sobre el hombro de una persona. Yo me pregunté ¿Cómo es que a la población le falta carne y solo hay carne para él? Ahí me detuvieron carabineros, yo les pedí que se lo tomaran con calma, que yo era fotógrafo de Brasil, pero me pegaron. Les dije que yo iba como reportero al ministerio. Me detuvieron, me llevaron a un cuartel, me preguntaron para qué quería las fotos, porqué estaba sacando fotos, les expliqué que estaba reporteando a los militares, me dijeron que era muy peligroso y que no se iban a hacer responsables por mi vida. Y después me soltaron, me pidieron que me quedara en el hotel.

En ese tiempo existía la agencia grande, UPI, de fotografías. Trabajadores de ahí me comentaron que había lugares donde llegaban muertos, al cementerio, donde había cuerpos de detenidos. Yo fui a hablar, porque hablaba en portugués, y fui con mi carta. Yo vi que llegaban muertos al cementerio, y abrí una puerta, y ahí no vi nada. Pero puse la cámara para sacar algunas fotos. Cuando llego a la cuarta foto, me pegan en la cabeza, en la nuca, y me gritan “hijo de puta”.

Toda la situación me puso muy triste. Por primera vez, no puedo tomar una foto que realmente me hubiese gustado tomar.

- ¿Sintió miedo por su vida esos días? ¿O miedo de ser detenido?

-Nunca he tenido miedo cuando tengo la cámara conmigo. Siempre enfrenté todo así. Cuando estuve en Chile, en masacres, en Brasil, nunca he tenido miedo si voy con la cámara.

Gracias a Dios nunca me pasó nada. Hoy con 87 años y con la gran exposición aquí en el Instituto Moreira Salles, han hecho una hermosa, maravillosa exhibición. No esperaba hacer un trabajo así allá en Sao Paulo, creo que es un momento hermoso. Incluso recibí llamadas de gente llorando después de haber visto la exposición de Sao Paulo, de la emoción por las fotografías.

"Yo vivo en Río de Janeiro, pero estamos tratando de llevar la exposición a Chile. Estamos tratando de negociar, porque vale la pena".

Es una cosa tan hermosa, tan real, tan importante para nuestra historia. Espero que este trabajo sea importante y que sea una exposición maravillosa. Tiene imágenes de Brasil del 68, hasta fotos del funeral de Neruda, mostrando la cámara que usé en ese momento, el dispositivo que usé para enviar una foto, por eso es una exposición didáctica. Estoy feliz porque vi algo hermoso, creo que es una exhibición muy linda.

Yo vivo en Río de Janeiro, pero estamos tratando de llevar la exposición a Chile. Estamos tratando de negociar, porque vale la pena.

FOTO DE EVANDRO TEIXEIRA EN EL ESTADIO NACIONAL.

- Ahora se está investigando un posible asesinato a Neruda, por envenenamiento ¿En ese momento usted pensó que lo habían matado?

-Yo siempre me imaginé, siempre pensé que lo habían matado, incluso cuando saqué las fotos del cuerpo de Neruda, pensé “este tipo fue asesinado”. Yo creo que es cierto que lo mataron.

- La exposición también incluye fotografías de la dictadura brasileña, además de la de Chile ¿Usted vio similitudes entre ambas dictaduras? ¿En las imágenes que capturó de ambas dictaduras?

- Yo creo que en Chile fue más violento, cuando fui al Estadio Nacional esa pobre gente, fueron muy violentos con ellos, incluso esos días mataron al cantante Víctor Jara. Fue una locura, muy violento lo que pasó en Chile. Se ve en las fotografías que están publicadas.

"Me emociona mucho recordar esos momentos y contar la historias de cada foto. Creo que hice un buen trabajo al mostrar especialmente a Neruda muerto. También mostrar las detenciones en el Estadio Nacional de Santiago, es un documento muy importante para el mundo".

También en Chile hubo muchas personas desaparecidas. Yo creo que en Chile mataron a mucha más gente que en Brasil. Acá en Brasil mataron personas, pero eso tomó mucho tiempo, pasó en 1976, 1978, en algunos momentos hubo situaciones muy violentas.

Pero creo que hubo más personas muertas en Chile.


FOTO DE EVANDRO TEIXEIRA EN EL ESTADIO NACIONAL.

-¿Cree que es importante que los jóvenes,- de Brasil y de Chile, ojalá- visiten esta exposición y vean este tipo de fotografías de la represión?

-Me emociona mucho recordar esos momentos y contar la historias de cada foto. Creo que hice un buen trabajo al mostrar especialmente a Neruda muerto. También mostrar las detenciones en el Estadio Nacional de Santiago, es un documento muy importante para el mundo. No lo podía creer cuando estaba tomando esas fotos, no lo podía imaginar cuando estuve en la Clínica Santa Marías, no podía creer la locura que estaba pasando en Chile, que si me pillaban podría hasta morir. Gracias a Dios no pasó nada. Soy muy afortunado. Yo traté de enfrentar con coraje esas situaciones para mostrar la realidad que estaba pasando. Para mí, recordar cómo llegué al Estadio Nacional es muy emotivo, fue muy fuerte.

Creo que fue un momento importante para mí.

Me hace pensar que me gusta hacer este trabajo y dejar registrado lo que pasa y contar la historia de un país. Para mí fue muy importante sacar estas fotos, tanto en Chile como aquí en Brasil. Estas fotos son documentos importantes, especialmente para los jóvenes.

Y ya han pasado 50 años del golpe militar. Considero que documentar estas fotos es de suma importancia, para mostrar todo lo que pasó en Brasil y en Chile también.

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